Un nuevo impulso experimento la industria fotonovelesca con la aparición de tres nuevos actores, luego de que ZigZag dejara de editar las revistas de Guido Vallejos, Cine Amor y Mi Vida. Foto Suspenso debutó el 12 de febrero de 1965 y demostró desde sus inicios que el formato podía ser mucho más variado en las temáticas tratadas, La segunda en salir fue Foto Romance, el 9 de marzo de 1965, y tenía en portada a Tomás Vidiella y Gloria Urzúa, protagonistas de “No somos culpables”, texto que inevitablemente se conecta con la inminente competencia editorial por las fotonovelas chilenas. Foto Apasionada, la tercera en aparecer, comenzó a circular la segunda quincena de julio de 1965, aunque este ejemplar no figura en el corpus disponible en la Biblioteca Nacional.
Foto Suspenso 6, marzo 1965.